El final de la segunda temporada de Andor llegó con un impacto emotivo y silencioso que los fans aún analizan. La serie concluye con un giro directo al inicio de Rogue One: Una Historia de Star Wars, pero guarda un último momento inesperado.
Bix Caleen aparece en Mina Rau, caminando por un sembradío con el hijo de Cassian Andor en brazos. Ella desconoce qué logró ni cómo murió en Scarif, pero los espectadores se preguntaron de inmediato si presentía su destino.
Debido a que la serie roza la idea de la Fuerza y presenta a Bix como alguien que cree en ella, la especulación se disparó. Algunos fans estaban convencidos de que su última mirada al horizonte insinuaba algo más profundo.
Hablando con GamesRadar+ sobre estas teorías, Tony Gilroy acogió con satisfacción la conversación, aunque aclaró cuál era la verdadera intención. Explicó:
Hay que tener cuidado con esto, porque no se debe robar la experiencia de otra persona. No era mi intención. No sé cómo circularía la información. Imagino que, en algún momento, ella descubriría lo que había sucedido. No sé cómo intuiría que él había fallecido.
Quizás esté sintiendo algo. Quizás sea un ritual, que salga cada noche y le diga algo. No estoy seguro, pero no era mi intención que lo supiera.
Originalmente, Andor se concibió como una saga de cinco temporadas. Esto cambió al principio del desarrollo, condensando los últimos cuatro años de la vida de Cassian en tan solo doce episodios.
Los eventos de Rogue One son muy breves, pero la imagen final de Bix y el niño despertó de inmediato otra pregunta sobre el futuro de la narrativa de Star Wars. ¿Podría otra película o serie explorar qué sucede con el hijo o la hija de Cassian?
Gilroy está abierto a la idea de que estos personajes continúen sin él, aunque es plenamente consciente de lo que puede pasar cuando una transferencia creativa sale mal.
Como sabes, no tengo control sobre nada. Nada de lo que hay ahí me pertenece. Es una parte muy interesante del negocio. Supongo que me sentiría genial si fuera genial.
Ya lo he visto antes en cosas en las que he participado, donde se corrompió por completo todo lo que intentabas hacer, y se violó por completo. Así que si es genial, fantástico. Si es una porquería, probablemente lo odiaré más que nadie.
Cuando se le preguntó qué podría convencerlo de volver a Star Wars, Gilroy dijo que ha llegado a un punto en su vida en el que elige proyectos con atención especial. A sus 69 años, quiere invertir el tiempo creativo que le queda en el trabajo que lo apasiona.
No busca recursos ni control ilimitados. Lo que sí echa de menos es hacer televisión en Londres. «Londres sería más atractivo que Star Wars. ¡Es una locura, es cierto!».
Con Rogue One aún elogiada como la película moderna más fuerte de Star Wars y Andor ampliamente considerada como una de las mejores series de Disney+ de la franquicia, la influencia de Gilroy en esta galaxia es innegable.
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